Por décadas se ha enseñado que el ser humano necesita unas 8 horas de sueño para mantener su salud mental y física. Sin embargo, muchas personas pueden vivir una vida plena y saludable durmiendo apenas unas pocas horas, lo que despierta la interrogante ¿cómo saber si duermes lo suficiente?
Vamos a repasar algunos hechos sobre las funciones del sueño y averiguar si descansas lo suficiente para tus necesidades. Aunque más de un 80% de los seres humanos duermen entre 9 y 10 horas, hay un 20% que tiene suficiente con solo 6 o 7 horas de sueño al día.
El sueño es un mecanismo fisiológico que ayuda al cuerpo a recuperar las energías perdidas y reparar tejidos musculares y nerviosos afectados por la faena diaria. Se conoce que el sueño sirve para que el cerebro «procese» a nivel subconsciente las experiencias emocionales del día, desechando aquello que no vale la pena conservar.
Esto ayuda a mantener el equilibrio mental y un ánimo más saludable y sereno. De hecho, se conoce que la falta de sueño prolongado puede llevar a estados sicóticos y agresivos en muchas personas.
¿Cómo saber si he dormido lo suficiente?
No es fácil saber si duermes lo suficiente, pues las necesidades de cada individuo varían en función de sus condiciones físicas, mentales, ambientales y sociales particulares. También se ha notado que hay diferencias en el tiempo de sueño entre grandes grupos sociales.
Por ejemplo, los portugueses duermen en promedio 7 horas y 55 minutos, mientras que los australianos llegan a las 8 horas y 30 minutos. A su vez, los japoneses suelen dormir solo unas 7 horas y 24 minutos mientras que en algunos países suramericanos el promedio de sueño pasa de las 8 horas y 15 minutos.
Factores que inciden en las necesidades de sueño
Aunque no se ha logrado identificar un gen específico que determine las necesidades de sueño del ser humano, si se sabe que la edad influye considerablemente. Los preadolescentes y adolescentes suelen necesitar más horas de sueño, pues en este período es cuando el sistema endocrino produce más cantidad de la hormona del crecimiento.
Por su parte los adultos mayores suelen dormir cada vez menos, o tener un sueño irregular, debido a alteraciones en el mecanismo cerebral que regula el ritmo biológico. Esto provoca que no descansen bien en la noche y luego pasen el día en un estado de agotamiento casi continuo.
El medio ambiente puede influir, sin importar la edad. Por ejemplo, el ritmo acelerado de la vida en las grandes ciudades genera un gran estrés físico y emocional en sus habitantes, quienes sienten que necesitan dormir más.
Quienes viven en regiones soleadas o con muchas horas de luz solar suelen requerir menos horas de sueño que los habitantes de zonas invernales o boreales. La contaminación sónica de las grandes ciudades reduce la duración y calidad del sueño, afectando el nivel de recuperación del cuerpo y mente.
Calidad versus cantidad
La mejor forma de saber si tus horas de sueño son suficientes es revisando cómo te sientes al despertar. «Si te sientes descansado, con energías y ánimo, es señal que dormiste suficientes horas», explica el neurólogo Lou Hu-Sen, de la Universidad de California, Estados Unidos.
De hecho, el especialista indica que una cosa es la calidad del sueño y otra la cantidad. Una recomendación para saber cuál es tu necesidad de sueño es revisar cuánto tiempo logras dormir durante las vacaciones laborales o de estudios.
«Esto es un buen indicativo de tus necesidades reales y una guía a tomar en cuenta durante el resto del año para conservar una salud ideal en cuerpo y mente», agregó Hu-Sen.